Eduard Munch es uno de los artistas noruegos más célebres, quizá sólo superado por Henrik Ibsen, dramaturgo de fama mundial.
Munch nació en Løten, Noruega, el 12 de diciembre de 1863; y murió en su casa de Skøyen, en Ekely, una población cerca de Oslo en 1944. Pasó su infancia en Oslo (entonces llamada Christiania). Su madre murió cuando él tenía cuatro años, víctima de tuberculosis; como le sucedería nueve años después a una de sus hermanas. Otra hermana sufrió un trastorno mental, y su hermano Andreas, murió tres meses después de casarse. Con tantas desgracias familiares, no es extraño que Munch se convirtiera en un hombre lleno de obsesiones, y que trasladara éstas a sus obras: la soledad (Melancolía), la angustia (El Grito, su obra más conocida, Museo Nacional de Oslo), la muerte (Muerte de un bohemio) y el erotismo (Amantes, El beso).
Munch afirmó para justificar sus tendencias obsesivas:
«La enfermedad, la locura y la muerte fueron los ángeles que rodearon mi cuna y me siguieron durante toda mi vida«
En 1880, a la edad de 17 años, se inscribe en la Escuela de Dibujo. Será en 1885, al recibir una beca del gobierno noruego, cuando viaje por primera vez a París, y conozca el impresionismo –corriente que comenzó a practicar–, sintiéndose especialmente atraído por Gauguin. Pronto Munch asimilaría las obras impresionistas para crear un estilo personal, precursor del expresionismo, movimiento artístico caracterizado por vivos colores y formas curvas, y con tendencia a reflejar temas trágicos o tensos. En 1892 traslada su residencia a Alemania, donde permanecería hasta 1908, cuando regresa definitivamente a Noruega. Allí sigue trabajando en algunos encargos, pero no tardaría en retirarse de la vida pública, para vivir recluído en su granja de Ekely, donde murió en 1944, a los ochenta años.
La obra de Munch se conserva en su mayoría en los museos noruegos. Dejó más de 1.000 cuadros, 15.400 grabados, 4.500 dibujos y acuarelas y seis esculturas a la ciudad de Oslo que construyó el Museo Munch en Tøyen en su honor. En España podemos apreciar Atardecer. Laura, la hermana del artista (1888), en el Museo Thyssen-Bornemisza de Madrid.
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